jueves, 5 de junio de 2014

Curruca tomillera y Bisbita campestre (abril 2014)

Debo esta entrada desde finales de abril, casi nada, más vale tarde que nunca y por lo menos se la debía a Oscar (Navarra al natural) por sus indicaciones.
La visita fue a la Laguna de Pitillas, más bien a sus alrededores, ya que en la mancha de agua, con bastante agua, aunque tenía presencia bicheril no estuve mucho tiempo, menos de una hora, cuestión de calor y lejanía de las observaciones, con todo pude ver y fotografiar, relativamente cerca, a alguno de los numerosos Somormujos lavanco y Fochas que se acercan por la orilla.

 Focha

 Somormujo lavanco

Ciertamente iba a por la Curruca tomillera, con el chivatazo de Oscar sabía a ciencia cierta por donde paraba. Llegar al sitio no tiene más complicación que a cada metro te van saltando todo tipo y variedad de bichos y entre andar y parar se hace larga la tirada, pero satisfactoria, je.: Trigueros, Alondras, Abubillas, Perdices, Cogujadas, Cigüeñuelas, Currucas, Conejos,...

 Alondra



 Cigüeñuela



 Cogujada

 Triguero


Después de toda la sucesión de apariciones llego a la zona, en diez minutos ya localizo algo que por la forma de volar y moverse cuadra con Curruca, es cuestión de empezar el acercamiento a ver si es la prota que busco, y efectivamente, así parece ser:

 Curruca tomillera ♂

 Curruca tomillera

  Curruca tomillera ♂




 Iba en prevengan también con el aviso del Bisbita campestre, que en cuestión de minutos se dejó ver ocupado como estaba en marcar su territorio.

 Bisbita campestre




Con esta entrada me da que bajaré la periodicidad de este blog de forma considerable, aunque tampoco era muy abultada que se diga... Vuelvo a los orígenes y a casa, así que espero que el protagonismo vuelva a recaer en mi otro blog dentro de mi posibilidades: Bicherío del Alto Nalón

miércoles, 16 de abril de 2014

viernes, 21 de marzo de 2014

Pechiazul y Escribano palustre

Sábado 16 de marzo, con un poco de retraso.
Para acabar ya el invierno me apetecía montar el hide otra vez por la zona de Cicero, así que un buen fin de semana era éste que cuadraban bien las mareas. Ya la llegada auguraba el "desastre", cosas que pasan... un Archibebe lejanísimo y ni una Gaviota. Aguanté una hora, y conseguí este aterrizaje de la Espátula, lo único, que bastante es cuando uno se mete en el chamizo a esperar.

Espátula
 
Con todo desmontado le echo un vistazo desde el dique a la charca interior, hay bastante movimiento de pequeños y en medio minuto veo ya algo que me llama la atención, tiro de cámara porque voy sin prismáticos y ahí le tengo, mira que es otro que le tenía unas ganas. Hace dos años me tocó la entrada de hembras y quedé con la chirrinta del macho. Conté tres y me dio la sensación que tenían la charca partida con un trozo para cada uno.

Pechiazul
 
Hace ya una temporada localicé la forma de entrar y acercarme a la zona de juncos, así que me fui metiendo hasta tener a vista la parte que queda al aire cuando baja la marea, por allí andaban los tres machos picoteando. De vez en cuando cada uno subía a una rama alta y se ponía a trinar, al rato ya tengo decidida mi "víctima", así que red, asiento y a esperar. No es tan confiado como la hembra de la otra vez, y las veces que se asoma lo hace lejos, además la parte más próxima está muy tupida de juncos y solo tengo un trozo libre que no se atreve a usar.

Pechiazul
 
 
Por suerte de vez en cuando sube a reclamar y aprovecho.
 

 
Después de un rato me acerco al árbol que usa de atalaya. En diez minutos ya está por allá, le oigo con su "tek, tek" pero no se atreve a enseñarse, en otros diez minutos le vence la curiosidad y se asoma, un ratín, pero con esto ya me puedo ir y dejarle tranquilo.

Pechiazul
 
Por los alrededores no paran: Lavanderas, Mosquiteros, Zarceros, Focha, Tarro blanco, Anade real, Mirlos, Ruiseñor bastardo, etc... pero supero la tentación de moverme porque me gustaría pillar al Pechiazul, que se me hace un poco más raro que el resto para fotografiar. Pero si se te pone éste a tiro, pues no perdono... casi un minuto lo tuve en los juncos, y casi un minuto estuve viéndole por el objetivo a placer, torsionado 90º pero a placer. ¡Vaya día! y vaya racha que llevo... ya me puedo dar con un canto en los dientes.

Escribano palustre
 


jueves, 6 de marzo de 2014

Ruiseñor bastardo

A este le tenía ciertas ganas desde hace bastante tiempo, y el pasado domingo se me puso a tiro unos breves segundos... aprovechables.






domingo, 23 de febrero de 2014

Collalba desértica

Después de haber leído el otro día en "Entre alpinas y nivales" que la Collalba desértica seguía por la zona en la que ya lleva unos meses, y aprovechando la alineación de astros propicia, pude acercarme hasta la playa de Muskiz a ver si tenía suerte con ella. 
No me lo creo, una vuelta y nada, doy otra y ahí me aparece, primero lejana pero claramente visible, la voy siguiendo un poco a ver como y por donde se mueve hasta que elijo un lugar para echarme a esperar. Ella anda por los alrededores picoteando tranquilamente, si la tengo ahí, pienso, será cuestión de tiempo que se acerque. Pero no contaba con un aliado sorpresa, se cuela una Tarabilla en su territorio y no tarda ni dos segundos en tirarse sobre ella para echarla, con tan buena suerte que vienen las dos en mi dirección, la Tarabilla juiciosamente opta por seguir su vuelo y ella va y se posa precisamente en la hierba que tengo preenfocada, la que me parecía el mejor oteadero para posarse. Empiezo a disparar y va y vuela hacia mí tranquilamente a capturar insectos, se me pone a 5 metros escasos, y yo rezando para que el buffer de la cámara procese rápido,,, que esto no se me repite en la vida. Fue cuestión de medio minuto, pero lo suficiente.









La nota triste la pone una imagen muy repetida este año....



sábado, 22 de febrero de 2014

Arao común

Del domingo 16, un paseo por la tarde por Castro.
Como ya se va viendo en bastantes blogs este año es muy grande el avistamiento de Araos por la costa cantábrica, unos cuantos, muchos, bastante maltrechos. Estos en partícular aunque activos tenían cierto "deje" de cansancio, y a la postre descansando en sitios donde la gente no dejaba de pasar y de mirarlos, eso sí puedo decir que hasta que se fueron un poco mar adentro no fueron molestados ni mucho menos por nadie.
El que sí presentaba un aspecto mucho más maltrecho era este Cormorán moñudo, completamente k.o. en las rocas del paseo... mucho me temo que no pasaría de la noche...

Cormorán moñudo

 Arao común